Faa Sai, una elefanta asiática del Parque Natural de Elefantes de Tailandia, ha encantado a los visitantes rompiendo repetidamente un aspersor en su recinto, creando su divertida fuente de agua.
El santuario en Chiang Mai compartió imágenes de Faa Sai chapoteando y rodando alegremente en el rocío, lo que se ha convertido en un ritual diario para el entusiasta elefante.
Después de ser rescatada de una vida de abuso y cadenas, Faa Sai encontró un nuevo hogar en el santuario, donde expresa su libertad de maneras encantadoras.
Mientras que otros elefantes suelen disfrutar del río, Faa Sai prefiere el aspersor, pero con una particularidad: la presión del agua simplemente no es suficiente para ella.
Así, todos los días rompe el aspersor al darle una patada a la tubería, lo que crea un chorro más potente. Según el personal del parque, su felicidad es evidente y nadie tiene el coraje de detenerla.
El personal explicó que la vida de Faa Sai antes del rescate era difícil. Había estado encadenada durante tanto tiempo que, cuando llegó por primera vez, caminaba dando saltos como si todavía estuviera atada.
Desde entonces, el santuario le ha permitido recuperarse completamente y ahora muestra una personalidad vibrante que cautiva tanto al personal como a los visitantes.
En el video, la alegría de la joven elefanta es contagiosa; se puede escuchar a los espectadores reír y vitorear mientras ella baila, chapotea y se recuesta en el agua.
Esta rotura diaria del aspersor se ha convertido en parte de su rutina, un recordatorio lúdico de su nueva libertad y del compromiso del santuario con su bienestar.